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Educación financiera

Con el Programa de Educación Financiera de Colsubsidio obtendrás las herramientas necesarias para poder tomar las mejores decisiones económicas. Aquí, juntos lo hacemos posible. 


Busca la libertad financiera

Que manejes a diario tu dinero no significa que lo manejes bien. Para tomar buenas decisiones financieras es necesario contemplar un panorama completo, no solo hay que tener en cuenta los gastos fijos (diarios y mensuales), sino que también los compromisos periódicos (anuales o semestrales), los pagos variables (atemporales), los ingresos, las deudas, el patrimonio y las inversiones.

El primer paso para establecer dicho panorama es definir metas y objetivos pues en la medida que sepamos priorizar, podremos bajar los gastos y aumentar los ahorros.


Lo que necesitas saber

El objetivo en definitiva es el fin que buscas, mientras que las metas son esos pequeños pasos que debes dar de manera secuencial o simultánea para llegar a tu objetivo. Las metas deben ser específicas, medibles, acordadas, realistas y tener una fecha límite; si no lo haces así, no estarás orientado a la acción y por lo tanto, empezarás a aplazar la realización de tus objetivos. Por lo anterior, es importante determinar junto con tu familia los objetivos y metas que quieran cumplir, usando herramientas tan efectivas como el Proyecto de Vida, un plan que además de ver al futuro, también determina los medios que se usarán para conseguir el objetivo final. ¿Cuál es tu objetivo? ¿Cuáles son tus metas? ¿Una casa propia es un fin o un medio? ¿Una carrera universitaria es un fin o un medio? ¿Un carro es un fin o un medio? ¿Ser feliz es un fin o un medio?

Más que un listado de gastos fijos mensuales, tu presupuesto familiar debe ser un verdadero plan de acción para equilibrar tanto el dinero que entra como el que sale. Consta de ingresos, gastos fijos, gastos variables y gastos periódicos. Tiene que realizarse en familia con argumentos y una metodología práctica; esto es clave para determinar si tu hogar está o no en un punto de equilibrio económico.

Este estado se logra cuando tu flujo de efectivo te permite cubrir todas tus obligaciones y necesidades; además, te permite ahorrar para afrontar imprevistos, invertir o adquirir bienes. Para alcanzarlo debes realizar ajustes orientados a conseguir un flujo de efectivo positivo, es decir, que tus compromisos económicos no superen tus ingresos y que te sobre dinero.

Es una parte de tus ingresos que no gastas y guardas para usar en un futuro. Con él obtienes efectividad económica, conformas capital para inversiones, cubres obligaciones y eventualidades futuras, al mismo tiempo que desarrollas autosuficiencia financiera. Sin embargo, el ahorro más que una metodología, es el resultado de un positivo e integral abordaje del tema económico familiar; por lo que antes de disponerte a ahorrar debes tener claros tus objetivos y metas, y poseer un punto de equilibrio económico.

Es un acuerdo que puedes pactar con una organización de servicios financieros, en el que la entidad se compromete a prestarte cierta cantidad de dinero y tú te comprometes a devolverlo con intereses en plazos pactados. Este contrato es ideal para que adquieras bienes y servicios que contribuyan al mejoramiento de la calidad de vida de tu familia. Para manejar los créditos de manera adecuada, es necesario que conozcas los siguientes conceptos:
• Monto: es la cantidad de dinero que recibes como crédito.
• Plazo: es la cantidad de meses en los que tendrás que devolver el monto más los intereses.
• Interés: es el porcentaje que te cobra la entidad financiera por el préstamo pactado.
• Cuota: es cada uno de los pagos periódicos que realizas para pagar tu crédito.
• Total: es el valor total que tienes que pagar (el monto más los intereses).

Estos tips tanto de seguridad como de finanzas contribuirán en el manejo de tus productos de forma más eficiente, obteniendo conocimientos y habilidades que te permitirán tomar mejores decisiones y disfrutar tus servicios financieros.


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